En la punta de los pinchos
El senderismo glaciar es una de las actividades más populares del valle de Chamonix, y que suscita cada vez más interés. A menudo vista como algo reservado a los alpinistas, esta actividad es cada vez más popular entre los amantes de la naturaleza, deseosos de seguir los pasos de los primeros exploradores de las cumbres. Pero, ¿qué es el trekking glaciar y cómo se prepara? Sumérjase en una actividad que combina descubrimiento, técnica y asombro.
Un paseo cargado de historia
Travesía de la Vallée Blanche en marcha glaciar ©MR
La historia de la marcha glaciar en Chamonix está estrechamente ligada al auge del alpinismo. A finales del siglo XVIII, figuras como Jacques Balmat y Michel Paccard marcaron el inicio de la exploración de glaciares al alcanzar la cima del Mont-Blanc en 1786. Esta expedición sentó las bases de una disciplina que transformaría los glaciares de la región en terrenos para la aventura y la investigación científica.
Con la llegada de los guías profesionales en el siglo XIX, la marcha por los glaciares se hizo progresivamente más accesible al gran público. La Mer de Glace, uno de los glaciares más emblemáticos del valle de Chamonix, se convirtió en un destino popular y accesible con la inauguración del tren cremallera de Montenvers en 1908. Desde entonces, esta actividad se ha convertido en una experiencia para disfrutar, una invitación a volver a conectar con la naturaleza en un entorno desconocido y con un equipo desconocido.
Dar el primer paso
Si los primeros pasos son vacilantes, ¡rápidamente se vuelven más fluidos! Con un poco de práctica, pronto se sentirá como un explorador. A partir de ese momento, caminar por el glaciar es un descubrimiento a la vez técnico y fascinante. Correctamente equipado, te moverás lentamente, utilizando técnicas sencillas: camina despacio, con los pies ligeramente separados para evitar que se crucen los crampones, y mantén el equilibrio. Poco a poco irá ganando confianza a medida que aprenda a adaptar su ritmo a los cambios del terreno y las condiciones.

Caminar por un glaciar es ante todo una aventura sensorial. El aire fresco de la montaña, el sonido de los crampones sobre el hielo y las montañas nevadas ofrecen una inmersión total en la naturaleza. Pero más allá de estas sensaciones, esta actividad tiene muchos beneficios.
Los beneficios de la marcha sobre hielo
Desde el punto de vista físico, la marcha glaciar pone a trabajar todo el cuerpo. Las subidas fortalecen las piernas, los descensos trabajan el equilibrio y la altitud favorece la respiración profunda. Es un excelente ejercicio cardiorrespiratorio que mejora la resistencia.
Mentalmente, el efecto es igual de potente. Estar en la montaña, en un paisaje casi monocromo, favorece la reflexión y la desconexión. A menudo, los participantes manifiestan una sensación de serenidad, ligada tanto al esfuerzo físico como a la maravilla del paisaje. También es una experiencia que refuerza la confianza en uno mismo, ya que cada etapa superada es una pequeña victoria ;-)
Nos conseils
Pour profiter pleinement de l’expérience, il est indispensable de bien se préparer. En premier lieu, s’entourer de professionnels expérimentés est essentiel. Les guides de Chamonix, formés aux spécificités des glaciers, assurent la sécurité tout en partageant leur passion et leur connaissance du milieu.
L’équipement joue un rôle clé. Si certains éléments peuvent être loués sur place, comme les crampons ou le harnais, prenez des vêtements adaptés aux conditions alpines : veste coupe-vent, sous-couches thermiques et gants isolants.
Enfin, la patience est une alliée précieuse. Marcher sur un glacier, c’est accepter un rythme lent. Vous verrez que très rapidement, ce temps au ralenti vous permettra d’économiser votre énergie et d'observer un panorama unique. Prendre le temps de vivre du temps perdu.

Les guides de montagne de la vallée
Cuestiones medioambientales: entre la maravilla y la responsabilidad
Aunque la experiencia de caminar por un glaciar es inolvidable, también conlleva la toma de conciencia de importantes problemas medioambientales. Los glaciares, testigos silenciosos del calentamiento global, retroceden a un ritmo alarmante. En Chamonix, la Mer de Glace ha perdido decenas de metros de espesor en sólo unas décadas. Este fenómeno repercute no sólo en el paisaje, sino también en los recursos de agua dulce, los ecosistemas alpinos y las poblaciones locales. La actividad en sí, aunque accesible, requiere una vigilancia especial. El equilibrio entre la exploración de esta actividad y la preservación de este frágil patrimonio natural es una cuestión clave. Por eso es crucial seguir las instrucciones de los profesionales, permanecer en las rutas señalizadas y no dejar rastro de su paso. El valle de Chamonix-Mont-Blanc, como zona pionera del alpinismo, desempeña un papel activo en la sensibilización y la iniciación a las buenas prácticas medioambientales.
Numerosas iniciativas, como programas educativos para visitantes y colaboraciones científicas, pretenden concienciar sobre la emergencia climática. Por eso, el Año Internacional de la Preservación de los Glaciares de la ONU , 2025, es especialmente relevante para el valle de Chamonix. Aquí encontrará más información sobre nuestras actividades de sensibilización. Al caminar sobre un glaciar, cada participante se convierte en testigo de un mundo cambiante, y esta experiencia puede inspirar un compromiso con su preservación.